lunes, 9 de noviembre de 2009

Las otras “elecciones” (Guido Romay Romay)

A menos de un mes de las elecciones generales en el país, la opinión pública de manera implícita y cada quien a su manera, tendrá o tiene la oportunidad de elegir el o los medios de comunicación de su preferencia en procura de una información veraz, equilibrada y creíble en la actual etapa electoral.

Lo que ocurre es que en esta recta final de proselitismo que vivimos en Bolivia, los eventuales contendores políticos a través de sus jefes de campaña y de sus allegados, recurrirán a todo lo que esté a su alcance para desmerecer y de ser posible para defenestrar a sus rivales políticos.

Sabemos que en etapas electorales y ahora mucho más en las actuales circunstancias, algunos candidatos a la presidencia de la república, así como los candidatos a senadores y diputados, se empeñarán en mostrarse como “angelitos” o si se quiere como los supuestos salvadores de la patria, especialmente aquellos que tienen un pasado cuestionable.

Por consiguiente, en este tramo final y ante la proximidad de las elecciones generales del 6 de diciembre, los candidatos y sus respectivos equipos de campaña, no tendrán ningún reparo ni escrúpulo para mentir, para “disfrazar” las cosas y sobre todo para recurrir a los medios de comunicación con una serie de argumentos sean o no verídicos y más que todo con poses demagógicas que caracterizan a una mayoría de los “políticos”.

La opinión pública o en este caso los televidentes, los radioyentes y los lectores de periódicos, se constituyen, como siempre, en los verdaderos jueces ya sea para valorar o en su caso para reprobar alguna entrevista, noticia, comentario o todo lo que se difunde a través de los medios de comunicación, especialmente en coyunturas tan especiales y delicadas como la que vivimos actualmente por la proximidad de las elecciones generales en el país.

Cotidianamente o en el día a día, por lo general observamos a los televidentes y los radioyentes, en el afán de sintonizar el programa de corte periodístico ya sea de televisión o de radio, que responda a sus expectativas en cuanto a información veraz, creíble y que muestre un verdadero equilibrio en el tratamiento de la información o en las entrevistas que vemos y escuchamos cotidianamente.

Consiguientemente y como siempre lo decimos una y otra vez, el rol de los medios de comunicación, especialmente de los medios masivos como son la televisión y la radio, es fundamental, delicadísimo y determinante para una opinión pública que merece una información responsable, equilibrada y ética.

Algo que también insisto las veces que hay necesidad de hacerlo y con sentido autocrítico, es que los comunicadores, los periodistas no tenemos por qué creernos “intocables”, y tampoco pensar que somos dueños de la verdad porque así como somos permanentes críticos de los políticos soberbios, demagogos y autosuficientes… los periodistas no debemos incurrir en aquello que tanto criticamos porque la humildad, la ética y el respeto a la opinión de los otros, son atributos de los verdaderos periodistas.

En todo caso e insisto en que la actual coyuntura electoral, implica tácitamente que la opinión pública es “sabia” para discernir o elegir (las otras “elecciones”) el programa o los programas ya sea de radio o de televisión que informen y orienten mejor; es decir los programas periodísticos que hagan una lectura adecuada de la realidad ya sea regional o nacional.

=========

gromay66@hotmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario