sábado, 26 de septiembre de 2009

Casi una hazaña (Editorial de La Prensa)

Los incrédulos de ayer ahora se muestran demasiado optimistas y exigentes. El Presidente quiere que se registre a cinco millones de electores y eso sería obligar al OEP a hacer un milagro.


Una nueva aspiración: 3,8 millones de votantes. Es la que pretende el Órgano Electoral Plurinacional (OEP) —si es que hay tantos electores todavía no inscritos— luego de haber realizado casi una hazaña al sobrepasar el cálculo inicial de inscritos antes del tiempo previsto para el cierre de los registros. Ésta es una demostración de eficiencia que muchos, pero especialmente el oficialismo, apoyado por un senador opositor incrédulo, pusieron en seria duda al iniciarse el proceso.

Fue tal la desconfianza que el Presidente de ese órgano electoral dimitió, probablemente para no comprometerse, porque no creyó, con la categórica afirmación de Antonio Costas, entonces segundo en esa entidad, quien aseguraba que en el poco tiempo que restaba para las elecciones, trabajando con decisión y poniendo el mayor esfuerzo posible, se lograría empadronar a los 3,5 millones de bolivianos que votaron en enero en el referéndum sobre la Constitución Política del Estado.

El oficialismo estaba seguro de que ante el fracaso del empadronamiento biométrico, debería aplicarse un padrón mixto, añadiendo al digital el padrón manual, ése que había generado tantas sólidas sospechas de fraude.

Costas asumió la presidencia del ente electoral y, con su gente, salió airoso del desafío. Cumplió con lo que parecía imposible y ahora va más allá para demostrar que tenía razón a pesar de los malos augurios.

Los incrédulos de ayer ahora se muestran demasiado optimistas y exigentes. Tanto así, que intentan cambiar las reglas de juego. El Presidente del país quiere que se registre a cinco millones de electores y eso sería obligar al OEP a hacer un milagro. Este organismo está para hacer los máximos esfuerzos, como los ha hecho hasta ahora. Puede incluso hacer hazañas, pero milagros… no.

Para garantizar la transparencia en las elecciones, el Gobierno debería hacer más bien que los sectores sociales que lo apoyan desistan de sus dictatoriales acuerdos comunitarios del voto consigna. No hay nada más autoritario que obligar a la gente, bajo amenazas de drásticos castigos, a votar por quien no quiere. Tendría que concienciar a la sociedad, especialmente rural, de que debe practicar la democracia que es el mayor sinónimo de libertad. Si no hay libertad, no hay democracia, y si no hay democracia, ¿de qué cambio en democracia se está hablando?

Democracia también es respetar el derecho de los adversarios a realizar sus campañas políticas donde quiera que vayan; es no impedirles entrar a determinadas poblaciones, sean rurales o urbanas; es no agredir ni emplear la violencia. No es cuestión de decir “somos demócratas” y actuar autoritariamente como en las mejores épocas de la dictadura cuando estaba prohibido disentir.

Las fuerzas del orden deberán también cumplir con su deber de garantizar el ejercicio de la democracia en todos los confines del

país, haciendo que los candidatos puedan hacer campaña sin riesgos en aquellos que se han convertido en feudos de ingreso prohibido.

Las élites del poder (Guillermo Capobianco Ribera)

Las élites del poder en Bolivia, aquéllas que se forjaron en la lucha clandestina contra las dictaduras militares y acompañaron junto al pueblo el proceso de retorno a la democracia, fueron devastadas junto al sistema político por la ‘marea’ electoral de diciembre de 2005.

Si de revolución democrática quiere hablarse, es ineludible hacer referencia al desplazamiento de las élites políticas en el ejercicio del poder gubernamental.

Las élites expresivas del sistema multipartidario fueron desplazadas y reemplazadas por una nueva, que es la que conduce actualmente los destinos del país.

Los nuevos gobernantes, consecuentes con la filosofía política que sustentan –el comunitarismo indigenista–, están en pleno proceso de implantación de su proyecto.

La nueva élite del poder tiene la ventaja de utilizar todos los recursos e instrumentos del Estado, sin distinguir aquello que es patrimonio de la sociedad en su conjunto y lo que es del Gobierno bajo el respeto de ciertas normas.

La nueva élite del poder conduce el proceso de implantación de su proyecto intentando, fiel a su ideología, sentar las bases de un nuevo modelo de desarrollo de economía y de sociedad.

Los resultados de ese intento, luego de un periodo de gobierno, han sido relativamente exitosos en cuanto a la tarea de destruir el entramado institucional del antiguo régimen conocido en nuestra cultura clásica: el Estado de derecho.

No ha ocurrido lo mismo respecto a las bases estructurales del modelo de desarrollo económico y social en vigencia, que se ha mostrado rebelde a los intentos oficiales de su transformación, sobre todo en el tipo de economía y sociedad que lo sustenta.

Las nuevas élites del poder y en el poder han avanzado en el proceso de implantación de una economía estatal reforzada en las áreas estratégicas como la de los hidrocarburos, la minería, la aviación comercial, los servicios y otros sectores.

Las élites dirigentes del modelo de economía dominantemente privada han demostrado firmeza en la defensa de sus principios y valores y de su forma y estilo de vida frente a la arremetida oficial que controla todos los hilos del poder.

La Feria Exposición de Santa Cruz ha demostrado la realidad de un país que no sólo quiere seguir viviendo en democracia, sino también enarbolando las banderas de un modelo productivo exitoso.

Sin embargo, luego de la devastación del sistema multipartidario, las élites institucionales, empresariales y corporativas han quedado huérfanas de expresión política.

El poder político estatal y gubernamental está concentrado en La Paz, en tanto que el poder económico, financiero, empresarial y corporativo se concentra cada vez más en el oriente, con la gran urbe cruceña como epicentro.

En un país polarizado, con economías y modelos de sociedad contrapuestos, se prefigura un futuro inmediato de mayor confrontación luego de los resultados de la consulta electoral de diciembre o de una pausa concertada de coexistencia democrática entre ambos.

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memocapobianco@gmail.com
Fuente: El Deber

Fallo revolucionario (José Antonio Aruquipa Z.)

Mientras los opositores se estancan en la dispersión, aún sin poder construir una opción creíble y coherente, el MAS ya canta victoria antes de correr y el electorado —especialmente de clase media— se siente abrumado por la confusión.

Como faltan 71 días para la elección y los candidatos aún no han presentado sus propuestas para la aprobación de leyes de desarrollo de la nueva Constitución, aquí les entregamos una sugerencia.

Juan Ticona Mamani y Filomena Cruz Ali de Ticona lograron, sin proponérselo, un fallo del Tribunal Constitucional que puede, si se aprovecha, servir como base fundamental de un proyecto de Ley de Deslinde Jurisdiccional que debería armonizar la justicia comunitaria con la justicia ordinaria.

Juan y Filomena, pareja de empresarios aymaras, viajaron a la comunidad de San Juan del Rosario, donde procrearon cuatro hijos y construyeron un hospedaje que comenzó a prosperar rápidamente. ¿El secreto? Trabajo duro y mejor oferta de precios. Mientras los otros hoteles, todos construidos y administrados por la comunidad, cobraban Bs 20 por día de alojamiento, los Mamani tarifaban Bs 15.

Los más de 9.000 habitantes de San Juan del Rosario, en la primera sección Colcha “K”, de la provincia Nor Lípez de Potosí, a cuatro mil metros de altura sobre el nivel del mar, vivían sólo de la producción de quinua y la crianza de llamas, hasta que aprendieron el negocio de la hotelería al verificar que su pueblo es paso ineludible para turistas del Salar de Uyuni y las lagunas Verde y Colorada.

Al constatar que los Mamani persistían con la rebaja de sus servicios, el corregidor Gabriel Cruz convocó al agente municipal Severo Choque y al presidente de la Junta Escolar, Isabelo Choque, a un cabildo de justicia comunitaria; analizaron el comportamiento de los competidores foráneos y determinaron su expulsión con una “carta de agradecimiento” de ejecución hasta el 15 de julio del 2002.

Los afectados acudieron esa misma fecha al Juez de Partido de Uyuni y plantearon un recurso de garantías constitucionales en defensa de sus derechos al trabajo, a percibir justa remuneración, a ingresar, permanecer y transitar por el territorio nacional y a la propiedad privada, reconocidos en la Ley Suprema. El 23 de julio del 2002, la justicia falló a favor de los Mamani. Pero al revisar esa sentencia, el Tribunal Constitucional encargó una investigación sociológica, recurrió al derecho comparado y tomó al toro por las astas para pronunciar varios principios revolucionarios en la jurisprudencia constitucional sobre la administración ancestral de litigios en pueblos originarios.

En la Resolución 0295/2003-R de 11 de marzo del 2003, el guardián de la Constitución reconoció que “en un país con diversas etnias y culturas como es Bolivia, las comunidades campesinas y pueblos indígenas mantienen con mucha fuerza” su justicia comunitaria.

Después de advertir que “las comunidades campesinas y pueblos indígenas no existen aisladas”, el Tribunal Constitucional reconoció la necesidad de “definir los sutiles límites entre el derecho consuetudinario y el ordenamiento jurídico general imperante en el país, sin lesionar ninguno de ellos”.

Para lograr “equilibrio y armonía” entre ambos sistemas, determinó “un punto de convergencia” y dictó que “toda persona tiene reconocidos sus derechos”, pero que “los mismos no son absolutos, encuentran límites en el interés colectivo (…)”. El Tribunal afirmó el amparo, pero pidió a los comunarios que informen por escrito si los Mamani “han adaptado su forma de vida a las costumbres de la comunidad de San Juan del Rosario”.

El autor es periodista y ex constituyente por Podemos.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Reyes Villa podría ser inhabilitado

De cara a elecciones en diciembre próximo, el gobierno boliviano anunció que el candidato a presidente, el ex prefecto opositor Manfred Reyes Villas, podría ser inhabilitado por deudas, destaca hoy el diario Cambio.

En declaraciones al matutino, el Contralor del Estado plurinacional, Gabriel Herbas, explicó que la ex autoridad de Cochabamba es acusada por daños económicos ascendentes a poco más de tres millones 100 mil bolivianos (casi medio millón de dólares).

Reyes Villa, precisó, postulante por Plan Progreso para Bolivia- Convergencia Nacional (PPB-CN), es acusado de la compra irregular de 26 vehículos lujosos con recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH).

"Cualquier ex autoridad que tenga un pliego de cargos por deudas o daño económico al Estado no puede asumir un cargo, tiene la obligación de pagar, y tampoco puede ser candidato a presidente, vicepresidente o miembro del parlamento", remarcó.

Herbas subrayó que esa norma está prevista en la Ley de Régimen Electoral Transitorio, avalada por el Congreso en octubre de 2008.

Asimismo, recordó que una auditoría especial a la prefectura de Cochabamba se verificó la adquisición de maquinaria y equipo pesado, que incluye vehículos livianos mediante contratos suscritos en diciembre de 2006, pero con cuantiosas pérdidas de bienes del Estado.

El caso se ventila en la fiscalía de esa región central y se prevé la emisión del fallo a finales de noviembre próximo, aclaró el funcionario.

También el compañero de fórmula de Reyes Villa, adversario del gobierno de Evo Morales, el ex prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, actualmente recluido en un penal de la ciudad de La Paz, está inmerso en otro proceso judicial por genocidio y asesinato.

La fiscalía boliviana acusa a Fernández de ser el principal responsable en septiembre de 2008 de una masacre de unos 15 campesinos en las localidades de Porvenir y Filadelfia.

En unos tres meses, los bolivianos elegirán en las urnas al presidente y al vicepresidente del país, así como a los 166 miembros de la Asamblea Legislativa Plurinacional (nombre que adoptará el Congreso en 2010).

¡Haga el amor, no el tinku! (Puka Reyesvilla)

Pocas cosas deben haber más desagradables que ser protagonista, objeto o víctima —dependiendo de la buena o mala fe con la que se las planifique (una de sus características es que son planificadas)— de una broma de mal gusto. De una broma pesada, de ésas que nos dejan expuestos al ridículo en público, en el mejor de lo casos, o al escarnio más cruel, en el peor. Quienes nos las gastan pueden ser nuestros amigos y nuestros enemigos; segundas o terceras personas. Es improbable que uno mismo planifique su propia puesta en ridículo; en todo caso, para un evento con esa sensación tenemos las categorías “situación embarazosa” y “metida de pata”.

¡Quién hubiera dicho que la primera víctima de esa broma de mal gusto que por el voto-consigna ahora ostenta el nombre de Constitución Política del Estado iba a ser su propio promotor, el gobierno del MAS y, por consiguiente, Su Excelencia!

Al menos eso se desprende de, para comenzar, cuando un concepto transversal de su texto como es el ajuste de cuentas (“descolonización”) con la Madre Patria, el bueno de Evo se manda una vergonzosa bajada de calzones ante las autoridades del reino como no se había visto en toda nuestra historia republicana —hasta un querendón de España como el suscrito, se puso colorado—. “No pasó nada” ha sugerido el hombre. Como no pasó nada, habría que empezar, por lo menos, arrancando la parte del preámbulo de hora cívica que ameniza sus páginas.

No digamos menos de la recurrente obstaculización y chantaje a que es sometido el mismísimo Gobierno —y las empresas estatales y privadas— por los “originarios” a cuento de que el chascarrillo constitucional los convierte en “propietarios” de los recursos naturales para disponerlos a su antojo. Lo adecuado es poner que tales recursos son de dominio originario del Estado, algo más serio que el patético “Y ahora.. .¿de qué vamos a vivir?” proferido por el inefable Morales.

Y así llegamos al artículo 10 de la chanza magna: “Bolivia es un Estado pacifista…”. Aplicada en su exacta significación, tal caracterización implica la supresión del servicio militar y un progresivo desarme que concluya en la desaparición de las Fuerzas Armadas. Para ponerlo caricaturalmente, bajo esta prescripción, el Estado, en lugar de rasgarse las vestiduras, debería otorgar el “Cóndor de los Andes” a quienes entregaron los misiles chinos. Más aún, tanto el Presidente como los ministros y cualquier boliviano que se sienta llamado a profesar el pacifismo plurinacional, deberían andar ataviados en blancas túnicas dando testimonio por el mundo del flower power pachamamista: Haga el amor, no el tinku. Esta vez, Premio Nobel garantizado.

Pero en cambio, ¿qué hace el régimen? Se anota en la carrera armamentista, millonada de por medio, inquietando a más de un vecino. ¿No ve que está contraviniendo su propio engendro? Menos ridículo se vería si el artículo de marras rezaba “Bolivia es una nación pacífica” entendido como “no agresor” pero que ante la eventualidad de ser agredido tiene el legítimo derecho de defenderse y, por tanto, de potenciar sus FFAA. Paz y amor, hermano Walker.
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El autor es docente universitario.
Más artículos del autor en: http://pukacosa.blogspot.com/

¿Por qué Santa Cruz no lidera la política? (Francisco Xavier Iturralde)

Santa Cruz de aniversario y políticamente debilitada, después de haber sido la niña de los ojos de los gobiernos de Paz Estenssoro y Banzer, que sumaron 25 años, aunque económicamente siga en el primer lugar. ¿Por qué? Opino que la élite pensante e influyente de Santa Cruz comete errores al proponer la ‘cruceñización’ de Bolivia, que son los paladines de la autonomía o, peor aún, que su clase dirigente o dominante (burguesía cruceña) retorne al liderazgo que tuvo.

Las autonomías son una variante moderna del federalismo y la Guerra Federal fue en 1898, cuando el general Pando –médico y militar– hizo sublevar a los indígenas gracias a que pertenecía a la nobleza aimara-quechua, que después también aceptó que Pando combata a sus aliados, quienes ponían en peligro la propiedad de las tierras de su misma casta y de los criollos. La ‘revolución de la igualdad’ en Santa Cruz fue en 1871, pero en ningún momento Andrés Ibáñez pregonó el federalismo, menos la autonomía para su región. Pretendía que todos sean iguales, por lo que la misma élite cruceña propietaria se sintió amenazada y atentó contra su vida en 1871. Lo de Melchor Pinto, en 1958, fue por las regalías del 11%.

Precisamente por pensar que las autonomías son una propuesta cruceña quedaron sorprendidos respecto a cómo el presidente Evo Morales la adoptó rápidamente con variantes de orden nacional, más que regional, por lo que los regionalistas del oriente que se consideran dueños de la idea lo acusaron de deformarla. Esto debido a que desconocían la amplitud del concepto mismo de autonomías, que va desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), con su propia Constitución (1994), hasta las Comunidades Autónomas en España (1978), que comprende estatutos de ciudades autónomas y la variante de Comunidad Foral de Navarra.

De haber sido adoptada tal como la propusieron en Santa Cruz, la denominada cruceñización de Bolivia habría vencido, visión reducida de lo que realmente es este país y que hace inmutable el marco en el que se encierra el discurso sin futuro de Santa Cruz para los cruceños, a pesar de la pequeña concesión de que ‘es cruceño quien trabaja por Santa Cruz’, pero en ningún caso que un cochabambino sea alcalde de la ciudad o un tarijeño sea prefecto del departamento, como es el caso de La Paz, y ni hablar de que un orureño sea presidente del país. Para que Santa Cruz pueda asumir el liderazgo político de Bolivia, su llamada burguesía debe dar paso a líderes obreros, como lo hizo la paulista con un Lula da Silva nordestino, es decir, aceptar a la Bolivia con diferentes etnias, estéticas, costumbres alimentarias y festejos.

Soy hijo de cruceña de 85 años, región donde nunca me sentí excluido, salvo cuando me topé con uno de esos radicales que nunca faltan, que deforman el sentir de la bolivianidad y conducen a sus seguidores hacia errores que no les permiten ningún liderazgo político nacional.
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El autor es economista
Fuente: El Deber

El proceso electoral en La Prensa

· Noticias del día

· El padrón de Beni y Tarija aumenta en más del 10%

· MAS anuncia que habrá sesión congresal antes del plazo fatal

· Comisión exige proceso penal contra Fernández

· Vocales prevén aprobar medidas para ciudadanos no registrados

· El PPB denuncia persecución judicial

· El “Vice” niega aportes obligatorios para el MAS


En busca de campañas pacíficas y democráticas (Editorial)

El hecho de que no se permitan que candidatos de una u otra facción desarrollen sus campañas proselitistas con total libertad no sólo viola normas democráticas más elementales… -->

Protección a candidatos (Paulovich)

Es lamentable el grado de indefensión que sufren los candidatos que se oponen a la reelección del presidente Evo. Para hablar de ese asunto tan importante vino desde Cochabamba mi tía Encarna para organizar la defensa de todos aquellos que creyendo en la democracia boliviana se lanzaron a competir con unos postulantes que lo tienen todo: oficinas, dinero, vehículos, espacios públicos y hasta protección policial y militar. -->

Sólo propaganda (Marcelo Varnoux Garay)
No es preciso repetirlo, pero la nacionalización de los hidrocarburos fue una payasada y YPFB es una empresa sin norte, administrada por gente que no sabe absolutamente nada… -->

jueves, 24 de septiembre de 2009

Cambalache, 75 años después (Fernando Suárez Saavedra)

En los últimos días y noches, casi todos los medios de comunicación de Sucre se han referido a las críticas que ha ocasionado el accionar político de John Cava, presidente del Comité Cívico de Chuquisaca; algunos ciudadanos han considerado que la labor de "tramitador" o de "operador", quizá "amarrador" "para buscar los mejores diputados y senadores" al grupo de Manfred Reyes Villa no es la adecuada para un cívico; otros, en cambio, han alabado e incluso han manifestado que Cava ha "luchado por la región". A ello se ha sumado la carta de past presidentes de CODEINCA que, abiertamente, cuestionan ese accionar y no ha faltado otro past presidente que destaca la labor supuestamente "unificadora" de Cava.

Ante esos ataques y defensas, ante las explicaciones e inútiles justificativos, surge en la mente de muchos ciudadanos la canción "CAMBALACHE" de Enrique Santos Discépolo: "Que el mundo fue y será/una porquería, ya lo sé.

En el quinientos seis
y en el dos mil, también
Que siempre ha habido chorros,
maquiavelos y amargaos,
barones y dublés.
Pero que el siglo veinte
es un despliegue/de maldá insolente,
ya no hay quien lo niegue.
Vivimos revolcaos en un merengue
y en el mismo lodo/todos manoseados."

El tango Cambalache se estrenó en 1935. Hace más de 75 años y continúa vigente. Unos argumentarán: "¡Sí! ¡Cava ha tramitado! ¿Y qué?". Algunos añadirán que: "Han sido de varias instituciones. La decisión ha sido grupal". Otros complementarán: "¡Ha procurado que los mejores hombres y las mejores mujeres de Chuquisaca estén en las listas de candidatos para diputados y senadores!". No faltará un tercero que se inmiscuya señalando: "¿En esas listas están los mejores hombres y las mejores mujeres de Chuquisaca para ser diputados o senadores?". Varios oyentes de las emisoras de Sucre se han cansado de escuchar voces de rechazo a Gerald Ortiz; ellos dicen: "¡No ha hecho nada por Chuquisaca! y ¿Quiere volver a ser senador?", "¡Porque tiene una avioneta para Manfred!, ¿Será candidato? Y concluyen: "Por ese partido, con esos elementos, con esos tránsfugas, no voto".

Y los ciudadanos que sólo viven del esfuerzo de su trabajo, el que no busca un curul, vuelven a recordar la continuación de CAMBALACHE:

"Hoy resulta que es lo mismo
ser derecho que traidor,
ignorante, sabio o chorro,
generoso o estafador
¡Todo es igual!
¡Nada es mejor!
Lo mismo un burro
que un gran profesor.

No hay aplazaos ni escalafón,
los ignorantes nos han igualao.
Si uno vive en la impostura
y otro roba en su ambición,
da lo mismo que sea cura,
colchonero, Rey de Bastos,
caradura o polizón./"

Hay muchos habitantes que en vez de tener rabia por algunas conductas o inconductas tienen pena por esos seres. Es que todo o casi todo se ha trastocado. Ahora se alaba, se felicita, se pondera el transfugio. Si alguien estaba en un partido y luego, por conveniencia, se va a otro, y después a otro, es motivo de felicitaciones. Ahora, en el 2009, el rostro de esos sujetos no se enrojece, ni por lo menos se sonroja cuando cambia de un partido político a otro. ¡Nada! ¡No hay valores! Se argumenta: ¡Es que era luchador (o luchadora)! ¡Se trenzaba a golpes! ¡El único (única) que insultaba! Principios: Nada. Eso era antes.

Santos Discépolo continuaba con su CAMBALACHE:

"¡Qué falta de respeto,
qué atropello a la razón!
Cualquiera es un señor,
cualquiera es un ladrón...
Mezclao con Stravisky
ya Don Bosco y La Mignon,
Don Chicho y Napoleón,
Carnera y San Martín...
Carnera y San Martín...
Igual que en la vidriera
Irrespetuosa
de los cambalaches
se ha mezclao la vida,
y, herida por un sable sin remache
y es llorar la Biblia
junto a un calefón.

Siglo veinte cambalache
problemático y febril...
El que no llora no mama
y el que no afana es un gil

¡Dale, nomás...!
Dale, que va...!
Que allá en el Horno
nos vamos a encontrar...!
No pienses más, sentate a un lao,
que a nadie importa si naciste honrao...
Es lo mismo el que labura
noche y día como un buey,
que el que vive de los otros,
que el que mata, que el que cura,
o está fuera de la ley...".
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El autor es periodista de CORREO DEL SUR

La pugna de candidatos en PPB se amplía a tres regiones

PROBLEMA • Postulantes de Chuquisaca, Tarija y Santa Cruz dejaron la alianza.

Fajardo dice que el asunto debe ser resuelto internamente.


Las pugnas por las candidaturas legislativas en la alianza Plan Progreso para Bolivia - Convergencia Nacional (PPB-CN) se extendieron a tres departamentos: Chuquisaca, Tarija y Santa Cruz.



En Chuquisaca, Óscar Michel, ex candidato a segundo senador suplente, denunció que, junto a otros siete aspirantes de la agrupación Chuquisaca Somos Todos, fue obligado a renunciar por los líderes de la agrupación ciudadana de la prefecta Savina Cuéllar, Libertad y Democracia Renovadora (Lider), como también por la agrupación Pacto de Integración Social (Pais) de la alcaldesa de Sucre, Aydée Nava.

“Nuestra renuncia no fue voluntaria, la Prefecta y la Alcaldesa nos pusieron un ultimátum de que si no renunciábamos, a los pocos días harían una conferencia de prensa para retirar su apoyo a Reyes Villa”, denunció.

El panorama es similar en Tarija. La diputada por Podemos Martha Humérez renunció a su postulación a la segunda senaturía suplente porque, según aseguró, la lista inicial de candidatos fue modificada “a última hora” por la Prefectura de?Tarija.

“Todo estaba consensuado, pero cuando han mandado la lista y la modificaron sin consultarnos, creo que está claramente establecido cuál fue la intención de esta actitud. El alcalde Montes tuvo buena fe al realizar su propuesta, pero no fue tomada en cuenta”, denunció Humérez, quien renunció a su candidatura junto a la ex Oficial Mayor de Culturas de la comuna tarijeña, Cira Flores Villarroel, quien postulaba a una diputación uninominal.

El alcalde de Tarija, Óscar Montes, se declaró “frustrado” por la elaboración de las listas, ya que no fueron tomados en cuenta los nombres que él propuso.

“Me siento frustrado políticamente, porque en esa lista parece que sólo está representado un sector y no la sociedad en su conjunto”, aseguró la autoridad.

En Santa Cruz, la aspirante a la segunda diputación plurinominal por el PPB-CN, Adriana Gil, expresó su disgusto por la postulación de Moisés Salces Lozano como su suplente, porque dijo que no lo conoce ni comparten la misma línea ideológica.

“Manfred (Reyes Villa) me prometió que hará respetar mi palabra. Yo quiero que mi suplente sea alguien de mi partido (Fuerza Demócrata) o alguien con quien tenga coincidencias”, subrayó.

A ello se sumó la ruptura de la alianza entre el?PPB y el Movimiento?Demócrata Popular.?El motivo: las candidaturas.

El vocero del PPB, Erick Fajardo, afirmó que Reyes Villa “no metió mano” en la elaboración de listas y que por lo tanto “las regiones deben superar sus problemas generando consenso. Ellas tienen la última palabra”.

Gil declara que no renunciará

La aspirante a la segunda diputación plurinominal de Santa Cruz por la alianza Plan Progreso para Bolivia - Convergencia Nacional (PPB-CN), Adriana Gil, dijo ayer a La Razón que no renunciará a su postulación pese a las continuas presiones de “algunos oportunistas” de su mismo frente político.

“Hay oportunistas dentro la Convergencia Nacional que quieren que renuncie. No les voy a dar el gusto, me están presionando para hacerlo, les digo que no renunciaré”, afirmó Gil.

La aspirante relató que en un principio ella era candidata a la primera senaturía por Santa Cruz, luego cedió su espacio a Germán Antelo y pasó a la segunda senaturía, pero después “en los pasillos de la Corte Nacional Electoral han cambiado las listas, acciones que me parecen muy poco éticas”, subrayó.
También manifestó que muchas personas que figuraban en la nómina inicial no fueron inscritas ante el organismo electoral.

Fuente: La Razón

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Hacia una reedición del reciente pasado

Naciente “hipercoalición” opositora

Concurrencia y participación electoral (María Teresa Zegada)

Es preciso comenzar reconociendo la exitosa labor que ha realizado la Corte Nacional Electoral y por supuesto todas las instancias subnacionales de esta entidad en estas últimas semanas, con la ejecución del padrón biométrico, en medio de suspicacias y escepticismos provenientes del entorno político, sobre todo del Gobierno. El haber logrado la primera de las metas inicialmente propuestas en menos tiempo del previsto, denota el esfuerzo con que ha trabajado este órgano que tenía —y tiene— la gran responsabilidad de garantizar la certidumbre del ejercicio de la democracia.

Sin embargo, tan o más importante y llamativa es la respuesta ciudadana, el interés por acudir a inscribirse en el padrón durante las primeras semanas para poder participar en las elecciones. Si miramos hacia atrás las tendencias de participación ciudadana en los procesos electorales (con referencia a sus respectivos padrones), han sido básicamente las siguientes: se puede percibir un notorio incremento en los primeros años de recuperación de la democracia, así en 1980 la participación electoral fue del 74,76% y ascendió en 1985 al 81,9%, luego descendió en 1989 al 73,5%, y se mantuvo como tendencia regular durante varios procesos, por ejemplo, en 1993 fue del 72,1%, en 1997 alcanzó al 71,3%, y en las elecciones del 2002 del 72,1%; de manera sorpresiva, sin embargo, para las elecciones nacionales del 2005 subió a 84,5% y más llamativo aún fue el resultado en el referéndum constituyente de enero pasado, cuando alcanzó al 90,2% de participación ciudadana.

Más allá de los tecnicismos y matices, estas tendencias en el comportamiento electoral demuestran, en primer lugar, un arraigo de la apuesta de la población por la democracia y sus reglas de juego, como lo demuestran los diversos estudios de cultura política realizados en los últimos años, en que la votación aparece como una vía aceptada y asumida por la ciudadanía para la selección de gobiernos; en segundo lugar, el impulso participacionista de la población sobre todo en coyunturas críticas. Al parecer en esos momentos, la ciudadanía responde a una interpelación política mediada por cambios y nuevas posibilidades, y está ligada a la idea y sensación de que “su voto cuenta”. Ello se percibe, por ejemplo, en los altos porcentajes de participación después del gobierno de la UDP signado por múltiples fracturas, y también después de la crisis de las sucesiones presidenciales Sánchez de Lozada-Mesa-Rodríguez. En ese sentido, discrepo con la idea de que la población acude a inscribirse y a votar fundamentalmente por temor a la sanción electoral o porque el voto en el país simplemente es obligatorio —que entre paréntesis está bien como resguardo legal—.

No sucede lo mismo con el voto en el exterior, que por los resultados preliminares y por las tendencias en los distintos países del mundo, no se acercará siquiera al 6%; porcentaje que fue fijado de manera precipitada y poco reflexiva, y que de manera más irreflexiva y precipitada aún está poniendo en riesgo el proceso electoral. En todo caso, el grado de involucramiento ciudadano no puede ser sino buena noticia para la democracia boliviana y sus instituciones.

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La autora es socióloga .

El empadronamiento biométrico (Roberto Ruiz Bass Werner)

TUMPA PIRE

El último desafío del OEP radica, entonces, en su capacidad para depurar los registros ciudadanos y hacerlo con precisión y a tiempo para enfrentar el calendario electoral.

Cuando propusimos autorizar al Órgano Electoral Plurinacional (OEP) la preparación de un plan de contingencia para aplicar en caso de que peligre el proceso de construcción del padrón biométrico, lo hicimos fundamentalmente con base en el análisis de los siguientes riesgos: 1) Logísticos; 2) Del proceso de captura de datos; 3) De la depuración.

En el primer caso, el punto crítico se dio cuando el OEP fracasó en su intento de adjudicar llave en mano el empadronamiento. El cambio de estrategia, al asumir la responsabilidad del proceso, permitió que este riesgo sea oportunamente superado. En relación con el segundo, dependía fundamentalmente de la conducta ciudadana en demanda de su registro en el nuevo padrón, la que fue, y es, ejemplar. Hasta el 20 de septiembre se habrían empadronado 3,5 millones de ciudadanos.

El OEP nos comunicó en agosto que su meta era de 4,2 millones, conformados de la siguiente manera: 3,5 millones del actual padrón, 300.000 que fueron depurados luego del Referéndum Constitucional, 200.000 nuevos inscritos y 211.000 registros en el exterior. ¿Cómo estamos en relación con esta meta? En función de nuestro modelo probabilístico, ajustado con los avances reales reportados, el 25 de septiembre estaríamos ya superando los cuatro millones de registros y restaría monitorear el empadronamiento en el exterior para completar la cifra meta hasta el 4 de octubre. En resumen, este segundo riesgo parece también estar superándose satisfactoriamente (¡!).

El último desafío del OEP radica, entonces, en su capacidad para depurar los registros ciudadanos y hacerlo con precisión y a tiempo para enfrentar el calendario electoral. ¿Qué podemos decir al respecto? De acuerdo con el National Institute of Standards and Technology (NIST) de los Estados Unidos, para los equipos NEC, la tasa de falsos rechazados (FRR) se multiplica por cuatro si usamos en la comparación, en lugar de 10 huellas, sólo dos y por 14 si usamos sólo una huella (¡!). Es decir, pasamos de 0,1% a 0,4% y a 1,4% de FRR en cada caso, para una tasa de falsos aceptados (FAR) de 0,01%.

Con una sola huella, y con imágenes de pobre calidad, esta tasa sube hasta el 17,09% (¡!). Suponiendo que tenemos un 30% de imágenes de baja calidad que provienen de personas de la tercera edad, especialmente mujeres, en campesinos y obreros que realizan pesadas tareas manuales, etc., y que utilicemos por razones de tiempo sólo dos huellas en la comparación, podemos estimar la precisión del nuevo padrón en un 95% de confiabilidad. Aproximadamente la misma que fue certificada por organismos internacionales para el padrón que acabamos de abandonar (¡!). Obviamente la calidad y potencial de mejoras del nuevo padrón es incomparable.

Finalmente, en relación con el tiempo requerido para la depuración, podemos afirmar lo siguiente: el data center del OEP tiene una capacidad de 10 millones de comparaciones por segundo. Con esta capacidad, y tomando en cuenta que, siendo “n” el número de huellas a ser comparadas, el total de comparaciones es N(N+1)/2, el tiempo requerido para comparar y depurar el padrón usando sólo tres huellas por registro es de 92 días y de 41 días si se utilizan sólo dos huellas. Es obvio que al OEP sólo le queda tiempo para utilizar en la depuración dos huellas, para llegar al 95% de confiabilidad en el nuevo padrón. Estos avances nos permiten descartar el plan de contingencia y la idea de utilizar un padrón mixto. ¡Felicidades al OEP y nuestros mejores deseos para una democracia fortalecida!
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El autor es Senador de Podemos
rrbw2005@gmail.com Fuente: La Razón

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Voto extranjero III (Carlos Cordero Carrafa)

DEMOCRACIA


Es un derecho político de los bolivianos residentes en el exterior votar y elegir diputados extraterritoriales que hagan gestión tanto en los países donde se encuentran en calidad de emigrantes como en Bolivia, formando estos representantes parte de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Como una manera de remediar el olvido que sufren por parte del Estado boliviano y de sus gobernantes. Pero este derecho de elección, como está diseñado lamentablemente, vulnera derechos ciudadanos de los bolivianos residentes en el país.

Los bolivianos en el exterior deben elegir representantes pero de ninguna manera al Presidente. Si bien es un derecho recientemente instituido, votar y elegir, sin restricciones asociadas a la condición social, al conocimiento, a las capacidades, sexo, orientación sexual, religión o ideología, este derecho para su pleno ejercicio tiene algunos requisitos como la edad para votar, la residencia y la nacionalidad. Para elegir autoridades bolivianas votan los bolivianos y punto. Como en España, para elegir autoridades españolas votan los ciudadanos españoles y punto. Algunas excepciones están asociadas a la naturalización y por supuesto que están sujetas a la ley. De igual manera la ley establece la edad para votar y puede ser los 25, 21, 18 o 16 años. Son el Estado y la sociedad los que determinan el momento y la madurez de sus ciudadanos para elegir gobierno.

Otro requisito importante es la residencia. Los bolivianos que viven en el país tienen el derecho a elegir y a ser elegidos. A los bolivianos que viven fuera de Bolivia, por intereses político-electorales, se les reconoce equivocadamente el derecho a elegir Presidente y Vicepresidente, quienes tienen un ápice de autoridad fuera de las fronteras bolivianas. Los gobernantes bolivianos gobiernan para los bolivianos, en el interior de las fronteras bolivianas. Si los bolivianos que residen fuera del país creen que votar y elegir Presidente cambiará su situación en el extranjero, están muy equivocados.

El presidente Morales, quien desde hace cuatro años gobierna Bolivia, tiene en varios países representantes oficiales, embajadores, cónsules y agregados de distinta naturaleza y función, que poco o nada han realizado en beneficio de los connacionales en el exterior. Por tanto, no es el cargo de Presidente lo que deben elegir, porque sería repetir un círculo ineficiente, sino diputados extraterritoriales con igual autoridad, funciones y competencias que los diputados nacionales. Auténticos representantes de los emigrantes ante un Estado y autoridades consulares que desarrollan su función con enormes limitaciones, venalidad y desafecto a su función.

Pese a quien le pese, el voto extranjero para elegir Presidente es una realidad y punto. Votarán, según estimaciones, 211.000 bolivianos residentes en Argentina, Brasil, España y EEUU. La cantidad y la forma en que está diseñado el voto en el extranjero es violatorio de derechos políticos de bolivianos residentes en Bolivia. Incrementar la cantidad de votantes es deslegitimar todo el proceso electoral, generando con ello fuertes resistencias, conflicto e inestabilidad, que dañan mucho más la credibilidad del actual Gobierno y del próximo. Quienes creen que con estas acciones están ayudando al candidato gubernamental, en realidad lo conducen al descrédito.

* Politólogo y catedrático

ccordero@estudiosdemocraticos.org

Elecciones y recursos del Estado (Editorial de La Prensa)

Se entra en una línea sospechosa cuando ese periplo es también utilizado para captar votos y hacer campaña. Lo hemos visto recién. Lo vemos permanentemente dentro y fuera de Bolivia.

Durante muchos años estuvo vigente en Bolivia una norma legal que ahora lamentablemente no se aplica más. Nos referimos a aquella que prohibía elegir a personas que estaban ocupando un cargo público. Como se recordará, quienes deseaban presentarse como candidatos a cualquier posición adquirida con el voto del pueblo debían renunciar previamente a sus funciones por lo menos con 90 días de anticipación. Esa disposición anulaba —o por lo menos reducía en alto grado— cualquier posibilidad de uso indebido de los recursos del Estado durante la campaña electoral del candidato, sea cual sea el rango de su candidatura.

Traemos esto a colación ante el espectáculo que hoy observamos, donde desde el “caballo del corregidor” —adagio popular adjudicado al gobernante que avanza con ventaja— el Movimiento Al Socialismo (MAS) avanza seguro hacia la meta, ya que los recursos estatales están a su alcance, listos y disponibles en abundancia. No importa cuántas “facturas de gastos” se presenten, el hecho salta a la vista por doquier. El mismo Primer Mandatario de la nación varias veces refutó el uso de recursos del Estado mientras estaba sentado en una silla del Palacio de Gobierno, un evidente recurso estatal, y parte de los bienes fijos que la ciudadanía pone a su disposición para que ejerza las altas funciones encomendadas. Desde esa humilde o lujosa silla hasta el mismo Palacio y la residencia, la cama donde el Presidente duerme, los vehículos de todo tipo que lo transportan, sus comidas, viajes, llamadas telefónicas, el canal oficial de Tv, etcétera, son todos bienes y facilidades para su uso oficial. Son, por definición, recursos del Estado. Eso es innegable.

Agréguese a lo expresado el pago de viáticos y pasajes —o medios de transporte— para viajes o visitas oficiales en el exterior e inauguración de obras u otros actos oficiales en el interior. Mientras las acciones se ciñan al propósito específico, todo muy bien y el uso de los recursos estatales es correcto. Se entra en una línea sospechosa cuando ese mismo periplo es también utilizado para captar votos y hacer campaña. Lo hemos visto recién. Lo vemos en forma permanente dentro y fuera de Bolivia.

El tema es delicado y da para mucho más. Por otra parte, el Gobierno no debería enfurecerse —manifestando su rabia mediante obsequiosos voceros— ante estas sanas críticas con fundamento. Debería más bien hacer una pausa en el camino y trazar una sana estrategia electoralista —para el presidente Morales y quienes lo siguen— sobre la base de una estricta separación entre uso adecuado de bienes del Estado y el mal uso dado en otros casos. Y ello con las sanciones, multas o devoluciones pecuniarias que correspondan.

Esa transparencia en el uso de los recursos del Estado en esta época de plena campaña electoral es lo que el pueblo espera del señor presidente Morales, quien siempre reitera su honestidad y proclama con vehemencia el principio de “corrupción cero”. Así de simple. Ni más ni menos.

Artículos en La Prensa

Editorial:
Elecciones y recursos del Estado

Artículos de opinión
Voto extranjero III-Carlos Cordero Carrafa *

Metáforas moribundas-Ramón Rocha Monroy *

Morlacos-Valentín Abecia López *

martes, 22 de septiembre de 2009

3.000 empadronados en la primera semana en Cataluña

Asociaciones de Bolivianos apoyan en la movilización ciudadana y se ha reclutado a volunarios para respaldar el trabajo de campo


Llegan a 3.000 los bolivianos registrados en Cataluña al culminar la primera semana de trabajo de empadronamiento biométrico de la Corte Nacional Electoral representada en Barcelona, proceso al que apoyan decididamente las distintas asociaciones de bolivianos y voluntarios, informó Teresa Ossio, representante de la CNE en esta comunidad autónoma de España.

El registro biométrico en Cataluña se realiza en tres centros de empadronamiento, el principal está en Barcelona y otros dos en las ciudades de L'Hospitalet y Sabadell; además, se cuenta con una unidad móvil que comenzó a recorrer distintos puntos de la ciudad de concentración habitual o programada de ciudadanos bolivianos.

Las cifras de empadronados obtenidas hacen que Barcelona encabece el registro en España, donde la CNE tiene representaciones también en Madrid y Valencia. Barcelona tiene la misma cantidad de equipos biométricos que la capital española, mientras que Valencia, al ser una comunidad de menor población, tiene menos equipos.

"Estamos muy contentos porque es muy alto el interés demostrado por lso ciudadanos bolivianos y de igual forma es muy esforzado y comprometido el trabajo que realizan los notarios operadores que llegan, en algunos casos, a estar hasta 12 horas atendiendo de lunes a domingo a las personas que quieren ser empadronadas", dijo Ossio.

Especialmente el fin de semana, hasta los centros de empadronamiento llegaron bolivianos desde poblaciones un poco alejadas y lo hicieron motivados por estar registrados y posteriormente poder participar en las Elecciones Generales del 6 de diciembre de 2009.

Si bien no existen cifras oficiales, debido a la alta presencia de ciudadanos bolivianos sin papeles regularizados, se estima que en Cataluña viven más de 100.000 bolivianos, de los cuales 30.000 tienen una situación legal en regla y 60.000 están registrados en los Ayuntamientos (municipios).

Las distintas asociaciones de bolivianos en Cataluña, como ser Sayariy-Urus, Asociación Rumbos, Integración Boliviana, Espíritu de Santa Cruz, Boliviamanta, Centro Boliviano Catalán, Casa de Bolivia en Cataluña, Centro de Integración Unamos Bolivia Cataluña (Ciubb) y Qori Inkas, entre otros, desde un principio han prestado su colaboración a este proceso, realizan labores de información, comunicación y movilización.

Con las mismas asociaciones, desde la dirección de Comunicación y Educación Ciudadana se ha conformado un grupo de voluntarios que desde esta semana comenzará a apoyar en el trabajo de campo.

A más centro, menos MAS (Julio Aliaga Lairana)

La exitosa estrategia Manfred-Leopoldo- Pepe Lucho (que dio por tierra con las aspiraciones de otros candidatos, inspirados también por el discurso de la unidad), parte del principio de que la polaridad Evo – No Evo, va a favorecerles, porque concentrará en Manfred Reyes Villa, la votación de la población contraria o descontenta con el MAS, que desde luego somos una mayoría. Pero la tesis está equivocada.

Escuchaba a Ricardo Paz Ballivian hablando sobre este tema, el otro día en ERBOL, describir a grandes rasgos que el electorado boliviano se divide hoy en un 40% de votos para el MAS y un 30% de votos anti-MAS (que va a votar por Manfred casi en su totalidad); otro 30% —decía él— es un voto fluctuante o indeciso, y es el voto que va a definir la elección. Si esto es así, ¿por qué las encuestas dan al MAS la seguridad de un voto superior al 50%?, y la respuesta a esa pregunta clave explicaría la razón por la que la polarización entre Evo Morales y Manfred Reyes Villa favorece más bien al primero que al segundo.

Una importante y decisiva parte de ese electorado fluctuante o indeciso votaría por otro candidato que no fuera Evo Morales, si y solo si, tampoco fueran Manfred Reyes Villa y Leopolldo Fernandez. Ese dato lo conoce el gobierno y ha construido su estrategia de campaña alrededor de esa polaridad, porque sabe que si la gran mayoría de electores nos vemos obligados a elegir entre Morales y Reyes Villa, Evo es un ganador seguro.

Dicho de otra manera, existe un tipo de elector que no votará en ningún caso al bloque restaurador de la derecha dura, ni por sus representantes eventuales. Es un tipo de elector urbano y que se considera a sí mismo como de "clase media" (es decir que sociológicamente debiera ser parte nde la oposición), que ante la disyuntiva, prefiere volver a votar por Evo Morales Ayma, así esté descontento o defraudado por estos cuatro años de gobierno del MAS. Por lo tanto la tesis de la polarización a favor de la oposición se cae, siendo reemplazada por otra mucho más sugestiva e interesante:

A mayor crecimiento del centro político, menos votos para Evo Morales y el MAS, mientras que el voto de Reyes Villa, para uno y otro caso, permanece constante.

¿Qué si hubiese sido distinto con una polaridad con otros candidatos? Habría que leerlo en coca; pero es posible especular que si, que una representació n menos radical en el polo opositor hubiera permitido un trasvase del voto menos traumático, al tener al frente una alternativa más amable, que no pudiera ser estigmatizada desde el MAS, de ultra-derecha, racista, machista y reaccionaria, como ocurre fácilmente con esta.

Una coyuntura tan difícil para la oposición, habla también de una ventana de oportunidad para el centro democrático, si el electorado se da cuenta de esta realidad: "a más centro, menos MAS". Un centro visagra para el entendimiento, un lugar donde se acepten las prioridades de inclusión e igualdad del etnonacionalismo gobernante, al mismo tiempo que las demandas de institucionalidad y libertad, que son irrenunciables para la democracia.

En ese centro hay un par de candidatos que no son necesariamente de la preferencia y simpatía principal de este grupo de electores indecisos y fluctuantes entre las dos polaridades, pero que tienen la gran oportunidad de conquistar y consolidar el centro de la política, para futuras y próximas oportunidades. La ecuación que hay que resolver, en ese sentido, nos habla de conducir el voto opositor a un entente entre la necesidad que equilibrar el balance de poder entre la oposición y el MAS, para evitar un futuro camino al autoritarismo sin tapujos, y la otra necesidad, de igual importancia, de evitar que el enfrentamiento trascienda en violencia y nos lleve a las puertas de una verdadera batalla, como podría darse entre dos polos extremamente radicalizados, como los de ahora.
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aliagapaz@yahoo. com

Entre Sodoma y Gomorra (Carlos Alarcón)

En la medida en que se va perfilando la tendencia del voto para las elecciones generales del 6 de diciembre, podemos afirmar siguiendo el dicho bíblico que estamos entre Sodoma y Gomorra.

Los oficialistas, binomio Morales-García, que invocan la igualdad y justicia social como una pantalla para conseguir la mayor concentración del poder y una permanencia indefinida en el gobierno; los opositores, binomio Reyes Villa-Fernández, que pregonan la democracia, el Estado de Derecho y los Derechos Humanos como una pantalla para proteger intereses particulares de grupo o sector. En ambos, la misma motivación: proyecto de poder y no de país.

En sus delirios descolonizadores, el binomio Morales-García defiende un modelo de Estado y sociedad indigenista comunitario y rechaza el sistema republicano democrático, aun cuando por razones electorales frente a la clase media no asume abiertamente y sin complejos esta preferencia. Véase el caso absurdo de las dos banderas para identificar a un mismo Estado. Si tendrían condiciones favorables para expresar sus emociones izarían únicamente la wiphala, considerada como símbolo del Estado descolonizador, y sepultarían en el armario de los trastos viejos a la Tricolor, asumida como emblema del Estado colonial.

En su empeño por salvar los intereses económicos y privilegios del moribundo sistema político tradicional, el binomio Reyes Villa-Fernández, en una jugada electoralista de último momento, conforma una heterogénea plataforma de candidatos a diputados y senadores, que responden a múltiples caudillos locales, sin una base sólida y coherente de unidad, programa y acción política, con algunos de ellos que desde el inicio demostraron que su mayor desvelo y preocupación es el espacio que se les ha asignado en la lista de candidaturas y otros que su mayor mérito es el de ser parientes del caudillo local que gestionó la alianza. En estas condiciones, sólo un milagro podría mantenerlos unidos en el nuevo Parlamento.

El elector indeciso de clase media se enfrenta a un dilema electoral. Si vota por la apariencia es probable que tenga ventaja el binomio Morales-García frente al binomio Reyes Villa-Fernández, por la imagen de renovación que todavía proyecta en la sociedad boliviana. Si vota por la realidad escondida detrás de las pantallas electorales, es probable que no vote a favor de ninguno de ellos.

En este contexto de polarización, los binomios del centro dejan de ser opciones viables porque pueden resultar funcionales en el futuro escenario político a un extremo o al otro. Si está en juego la construcción de un nuevo Estado y sociedad en Bolivia, con dos visiones encontradas y contrapuestas, abstraerse de esta realidad para proponer empleos, mejor gestión pública, seguridad ciudadana u otra cosa por el estilo, es como estar tocando el violín mientras se está hundiendo el Titanic.

A futuro es necesaria una opción política de renovación que encuentre la forma eficaz de integrar estas dos visiones de país.
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El autor es abogado constitucionalista.
Fuente; La Razón

lunes, 21 de septiembre de 2009

Doña Anita (Claudia Benavente)

CLEPSIDRA

La idea inicial de esta entrega de opinión era volver al tema de Ana María Romero de Campero. Luego el asunto parecía enfriarse por la distancia que ya nos separa de la noticia. Sin embargo, la columna dominical del colega Carlos Morales (La Prensa, 13–09–09), entre otras posiciones vertidas en este último tiempo, nos dice que la cosa sigue caliente y nos permitimos un par de consideraciones más.

La decisión, absolutamente sorpresiva, de la periodista y ex defensora del Pueblo Ana María Romero, de aceptar ser candidata a senadora por el Movimiento Al Socialismo (MAS), además de enojar a los conservadores del territorio nacional, ha despertado varias interpretaciones que se dejan ganar nuevamente por la polarización de posiciones (y no la polarización numérica) en torno a la interpretación ideológica del presente boliviano.

Comencemos con el sentimiento de decepción que ha despertado la decisión de Ana María. Para Carlos Morales es “una enorme decepción para quienes vieron en ella a una de las más significativas articuladoras del diálogo y la mediación en una sociedad en conflicto”. Disentimos por los mismos elementos: su ganado liderazgo en el campo de los derechos humanos, su ser periodista, su ser directora de Presencia, la forma como ha esculpido el Defensor del Pueblo, su mediación en los momentos trágicos del país, su aporte concreto desde la Fundación UNIR, su vida misma vista desde cualquiera de las ventanas son suficientes ingredientes para cocinar con dignidad una vida política en términos estrictos, pues Anamar desempeñó casi siempre un papel político.

Disentimos también con Carlos sobre el hecho de que “Romero representó a esos sectores de clase media que rechazan la violencia, el enfrentamiento y la polarización del país”, pues esta mujer representó a estos sectores tanto como a otros, más populares, indígenas, que también rechazan la violencia y no por eso renuncian a su sueño de cambio, a su anhelo de no ser ninguneados por su lengua materna, por su lugar de nacimiento, por su color de piel o por su nivel de escolarización. Esto libera a Ana María de ser estandarte de un sector específico de la sociedad y le da la autoridad para seguir mediando y construyendo puentes, como le dijo Evo Morales cuando la invitó. Y esta invitación no devalúa su logro pasado ni tiñe su discurso o acción en los próximos meses y años.

Un argumento que circula con facilidad en el medio es que a los periodistas no nos puede ir bien en política: véase a Carlos Mesa, María René Duchén, Cristina Corrales… Sin embargo, hay que mirar cada caso con una lupa específica. La de Anamar habla de una madurez que la fortalece ante un contexto difícil. Lo más alejado de una levantamanos, con la certeza de que ni cuatro ni cien masistas militantes la van a domar, Romero promete calidad en el debate del futuro Senado. Por todas estas razones, no entendemos por qué tendría que ser mezquina esta apuesta del MAS. A lo mucho resulta cándida si no se han dado cuenta de la gigante a la que están abriendo la puerta.

Por todo esto, queremos reiterar, desde este espacio, nuestro respeto a esta constructora de la democracia, a esta militante de los valores humanos, a la doña Anita de todos los tiempos.
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La autora es doctora en comunicación
lapinbenavente@hotmail.com

De ciertas miserias cruceñas (Rubén D. Atahuichi López)

PARTE–CONTRAPARTE




Ciertos liderazgos cruceños acaban de desnudar una de sus peores miserias con las que alimentaron sus luchas autonómicas, ahora incluso en desmedro de una dirigencia que hasta hace poco mostraba una aparente cohesión. Rechazar la presencia del Presidente en la apertura de un evento simbólico de Santa Cruz, la Expocruz, no es más que la ratificación del clima de intolerancia y racismo que sustentan las acciones de algunos miembros del comité cívico.

Sin mayor desparpajo, el titular de la organización, Luis Núñez, promovió una protesta institucional contra la decisión de la Cámara Departamental de Industria y Comercio de Santa Cruz (Cainco) de invitar al Mandatario a la feria, al punto de considerar a sus amigos empresarios de “traidores” y amenazar con renunciar a su cargo. Sobre lo último, que lo hubiera hecho, habría sido mejor para los cruceños, quienes ahora se encuentran en una auténtica polarización, marcada además por las candidaturas de Germán Antelo (con Manfred Reyes Villa) y Óscar Ortiz (con Samuel Doria Medina).

Sinceramente, no me preocupa esa polarización, y, al contrario, creo que va a hacerle mucho bien al país, pues va a permitir a los cruceños decidir entre los radicales y moderados. Y los radicales no están en la línea de los cambios en el país, sino en la defensa a ultranza de los privilegios que siempre tuvieron. Y, ojo, esa polarización está en el lado de la oposición gubernamental, de la que puede sacar tajada el oficialismo.

Si hacemos un recuento de las acciones de esos liderazgos en los últimos meses y años, los resultados nunca los respaldaron. Así, la autonomía que pelearon no funciona ni es constitucional, sus cuadros políticos están tan dispersos y maltrechos (pregunten si Ortiz quiere a Antelo o Rubén Costas a los dos, por ejemplo), la nueva Constitución Política del Estado que rechazaron ahora los rige, el ratificado Evo Morales los ensombrece y gobierna, y hasta pagan —a través de un débito autorizado por el Gobierno— los destrozos que ocasionaron sus facciones cuando por estos mismos días del año pasado se ensañaron contra las oficinas del Estado, en el afán de desestabilizar la actual administración gubernamental.

¿Ustedes creen que los cruceños se merecen esto? No. Esos líderes les hicieron creer que luego del 4 de mayo del año pasado iban a tener autonomía o mejor gobierno departamental (y el salario de 1.000 bolivianos), que eran sus paladines de la libertad y la democracia, y que sus luchas iban a derrotar al régimen actual. No, así no se pelea por el país. A ver, ¿qué habrá dicho Núñez en Europa al denunciar que la administración de Evo Morales viola las libertades y la democracia si él mismo, como muchos de su logia, es quien promueve discriminación e intolerancia?

Y así, el comité cívico y sus aliados hacen lo mismo que denunció hace unos días el ex presidente de Estados Unidos Jimmy Carter, quien ante la oposición de los republicanos a las políticas de Barack Obama dijo que aquéllos tienen actitud racista.

Seguramente los costos se verán muy pronto, cuando los resultados electorales sepulten definitivamente a esas dirigencias que no se dieron cuenta de que el país ya no es el mismo de antes, es un país que clama por una convivencia pacífica, censura la intolerancia y el racismo y quiere líderes inteligentes, no retrógradas ni fascistas. Lo siento, si bien el título de esta columna puede entenderse como una alusión a los cruceños, en realidad se refiere, de veras, a sólo ciertos líderes cruceños, de los que sabemos los bolivianos y los que viven en esa cálida región.

El autor es comunicador y periodista

rubendal@yahoo.com

ABC de la estrategia (Romano Bismarck Paz Alvarez)

Me disculparan ustedes, pero cansa darle tanta lata a la cuestión política, uno quisiera escribir sobre temas de cultura, arte, literatura, ocio, moda o ¿por qué no? de como la tecnología nos maravilla cada día. Pero es que verdaderamente pasa cada cosa en nuestro lindo y querido país, que uno no puede quedar sin inmutarse.

En la política como en la guerra, solo los necios actúan por odio o por amor, el juego de poder político se asemeja a un mega tablero de ajedrez, donde cada uno de los actores debe calcular milimétricamente sus movimientos, a fin de obtener el máximo rédito, en desmedro de sus contrincantes.

Si verdaderamente querían aguarle la fiesta al presidente del Estado multiétnico y pluri-folklórico, tenían que invitarlo y recibirlo en la afamada feria exposición de Santa Cruz, de la que me imagino estamos orgullosos la gran parte de los bolivianos. Bastaba con que los principales opositores se encarguen de organizar una comitiva de bienvenida, que desnude real o artificialmente –cada quien vea según su propio criterio- el grado de rechazo que tiene la política de Morales en esta parte del país. Esto por supuesto en el caso de que este sujeto cometa la locura política de participar de un acto público donde las masas son potencialmente discordes a su gobierno. En este apéndice me dirijo a usted querido lector, para preguntarle ¿quién controla a las masas, a las bases del partido, a las juntas vecinales, a los movimientos sociales, a los indígenas, al ciudadano común?, en teoría nadie, en la práctica siempre hay más de uno.

Grato favor el que le hicieron al vetarlo, lo excusaron de participar de algo que le restaría puntos en su campaña y que ni sus mejores escuderos sabrían recusar adecuadamente su participación en tan bochornoso mitin. Le dieron los argumentos suficientes para que los acuse justificadamente de fascistas, intolerantes e inclusive racistas, además perdieron dos oportunidades mediáticas muy importantes:

Primero, vender la feria al mundo, como vitrina de la Bolivia productiva, pujante, abierta, democrática, etc. Ya que nuestros presidente es una celebrity mundial, y hubiera arrastrado obertura de medios internacionales, lo que por inercia acarrea oportunidades de negocios.

Segundo, la oportunidad de mostrar al mundo entero el grado de rechazo que se tiene en buena parte del país, hacia la política desarrollada por el actual gobierno.

Como de estrategia de política se trata, no puedo evitar dar mi punto de vista, me centro en interpretar los juegos de poder barajados por las partes involucradas e intento no tomar partido. Así que les digo se aplazaron como actores político, cambien de asesores, y si verdaderamente no entienden que en Bolivia la estrategia política es medio turbia y sucia -situación a la que lamentablemente nos hemos acostumbrado- dejen el espacio a otros menos pasionales y mas calculadores. Por favor les pido, entiendan que no tengo nada en contra de nadie, la política yo no la he inventado, y ciertamente puede ser catastrófico no reconocer las torpezas.
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marck_paz@hotmail.com
Fuente: Aula Libre

domingo, 20 de septiembre de 2009

Días de furia (Róger Cortés Hurtado)

LA LUZ Y EL TÚNEL

La hora de la inflexión ha llegado y así lo muestra la declaración del directorio de la Cainco, en presencia y compañía del representante de la confederación de empresarios...

Voy a proponer que esos traidores de este pueblo nunca más participen con las instituciones del Comité pro Santa Cruz (sic), bramó el máximo dirigente del comité cívico cruceño, definiendo una declaración, propuesta y posición, según registro del diario El Deber*, el lunes 14 pasado. El estallido fue causado por la invitación de la Cainco al presidente Morales para inaugurar la feria exposición departamental. Ésa, también, ha sido la propuesta derrotada y desechada por una asamblea cívica que respaldó moralmente a su dirigente, al mismo tiempo que archivaba y olvidaba, tan rápido como podía, la iniciativa de expulsiones y sanciones que la había congregado. El sismo político local se prolongó casi toda la semana y resulta muy apropiado para comentar tendencias y proyecciones electorales y postelectorales.

El incidente se proyecta sobre el binomio de los ex prefectos de Cochabamba y Pando, en tanto que esa fórmula representa, en primer lugar, a la franja de oposición más dura y frontal, sintonizada, espiritual y políticamente, con la explosión anímica del dirigente cívico. Igual que él, experimentará las profundas contradicciones que han fracturado la compactación de una élite, alineada por un lapso prolongado detrás de posiciones tan radicales que colisionaron con los intereses de algunos de sus componentes.

La hora de la inflexión ha llegado y así lo muestra la declaración del directorio de la Cainco, en presencia y compañía del máximo representante de la confederación de empresarios: Los principios que nos sustentan son la producción, la apertura y la inclusión. La Cainco siempre ha respaldado la tradición institucional de invitar al Presidente de Bolivia a la Expocruz (jueves 17). Simultáneamente, un gerente de la Fexpo reiteró que ésta busca alejarse del campo político y centrarse en la producción. El viraje pragmático de sectores empresariales urgidos de normalizar sus relaciones con el aparato gubernamental se ha impuesto al percibir que sus actuales administradores tienen a su favor todas las posibilidades de renovar su mandato en diciembre. Todo ello presiona objetiva y ásperamente sobre la candidatura opositora con más opciones, estrechando su espacio electoral y su fuerza y eficacia postelectoral.

La prevalencia de ese estado de ánimo explica la irascible reacción que provocó la presencia de la ex defensora del Pueblo Ana María Romero en las listas parlamentarias del IPSP/MAS. La elevada dosis de violencia simbólica contra ella alcanzó el límite de cuestionar toda su trayectoria y poner en duda sus motivaciones y su libertad de elegir la opción que prefiera. Todo indica lo inútil de tal ejercicio, porque no menoscaba su credibilidad e integridad y refuerza el efecto buscado con su postulación, que promete mayor apertura y tolerancia. Más allá de las tradicionales reacciones que concita cualquier signo interpretado como deserción clasista en las élites tradicionales, la brusquedad extrema que se ve en este caso ratifica la sensación de derrota anticipada que cunde entre los “duros”. Los únicos que pueden atenuarla son los estrategas electorales del oficialismo, cada vez que rinden culto a las campañas de propagandismo comercial, el mercadeo social y al más absurdo ilusionismo aritmético, como cuando apuestan a menudas maniobras o inaceptables cambios de reglas, que sólo sirven para resquebrajar la confiabilidad del acto electoral y el entusiasmo de su base social.
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* Todas las citas se han tomado de El Deber
El autor es Profesor universitario
hebdicom@yahoo.com

Mentiras en órbita (Humberto Vacaflor)

Los candidatos deben saber que tienen que tamizar sus mentiras. No tendrían que exagerar en sus ofrecimientos.

El ofrecimiento más excéntrico que se ha hecho hasta ahora en esta campaña electoral es el del satélite artificial. La idea es gastar 406 millones de dólares, como hizo Venezuela en octubre del año pasado, para tener un satélite hecho en China, que tendrá, con suerte, una vida útil de 15 años.

Un monto tan grande podría servir para otras cosas. Por ejemplo para poner una cama por paciente en los hospitales, a fin de que no las sigan compartiendo. O para mejorar las escuelas. O los caminos.

La capacidad del satélite venezolano excede la demanda de los científicos de ese país, que no son muchos. Por lo tanto, con mucha sabiduría, Uruguay cedió su derecho a contar con un satélite propio al país de Hugo Chávez a cambio de usar 10% del Simón Bolívar, lo que da a los uruguayos mucho más de lo que necesitan en comunicaciones satelitales. Y gratis.

La ventaja de los uruguayos es que cuando estaban haciendo ese arreglo con Venezuela, no estaban en medio de una campaña electoral.

El presidente Evo Morales podría aprovechar los estrechos lazos que le unen a Chávez para pedirle que ceda a Bolivia otro 10% de la capacidad del Simón Bolívar. Podría decirle que sabe que la capacidad de ese satélite no ha sido usada ni siquiera en 30% hasta ahora por los venezolanos.

Los venezolanos dicen que el 2013 lanzarán su propio satélite, aunque sólo porque su Presidente quiere que su país sea una potencia de veras y no simplemente un país que vive exclusivamente de ser el proveedor de petróleo, pesado, a Estados Unidos. Habrá que desearles mucha suerte a los venezolanos en ese lanzamiento, para que no les pase lo que a los brasileños el 2003, que hicieron varios intentos fallidos hasta que optaron por seguir confiando en el satélite “De coleta de dados” lanzado en Estados Unidos en 1993. Sirve para vigilar las condiciones de la región amazónica y es conocido como el “satélite verde”.

El presidente Morales ha dicho que el satélite “Túpac Katari” servirá para mejorar las comunicaciones en el país. Ese objetivo se podría lograr con una mínima parte de la capacidad del satélite venezolano. Bolivia podría también pedir ese mismo favor a Brasil, Argentina o Chile, para que le permitan usar una pequeña parte de la capacidad de sus satélites, pero probablemente el presidente Morales prefiera llevar su esquema de simpatías con Venezuela hasta el cielo.

Esa pequeña parte de la capacidad del satélite podría servir, además de ayudar a las telecomunicaciones, para que Entel no vuelva a dejar a seis departamentos del país sin el servicio, como ocurrió la semana pasada, para otros fines. Por ejemplo podría ayudar a la FELCN a detectar la salida de la droga del país. Y corregir de esa manera un contrasentido: todos los días se descubren 15 fábricas de cocaína en Bolivia, pero todas las capturas de droga que hace la FELCN son de cocaína peruana. Es decir que la droga boliviana sale del país sin problema. El satélite de algún país amigo podría ayudar.

Y podría servir también para que la Corte Nacional Electoral detecte, desde el cielo, cómo es que algunos finados vienen, también desde el cielo, a votar puntualmente en referendos y elecciones.

Artículos de La Prensa de hoy

¿Y los 500 años?-Carlos Morales Peña *

Denisse Copeticona-Carlos Hugo Laruta *

Millones para YPFB-Alberto Bonadona Cossío *

Las mujeres y la pobreza-Waldo Albarracín Sánchez *

Una huelga normal-Guillermo Mariaca Iturri *

40 años de cooperación suiza-Lupe Cajías *

Días de furia-Róger Cortés Hurtado *

Indulgencia plenaria...-Cayetano Llobet T. *

Impunidad en la masacre de Porvenir-Carmen Ávila Vadillo *

Sin palabra-Jimena Costa Benavides *

Lo que crees ver-Édgar Arandia Quiroga *