Árbitro imparcial (Ricardo Paz Ballivián)

De acuerdo con una nota de la agencia gubernamental ABI: “el presidente Evo Morales lamentó que el Órgano Electoral Plurinacional haya dejado de ser un árbitro imparcial para administrar las elecciones generales del próximo 6 de diciembre al haberse parcializado con uno de los partidos que pugnan por el poder”. Según el reporte, el Primer Mandatario y candidato del MAS habría manifestado textualmente que: ´El OEP ha asumido una abierta parcialización con uno de los partidos y su presidente, Antonio Costas, se ha convertido con sus decisiones en el mejor jefe de campaña del Plan Progreso para Bolivia (PPB)´. Inmediatamente después, informó la agencia de noticias Erbol, que Evo Morales fue mucho más allá y “anunció que demandará al presidente del Órgano Electoral Plurinacional, Antonio Costas, ante observadores y organismos internacionales por parcializarse con el candidato a vicepresidente Leopoldo Fernández, quien está recluido en el penal de San Pedro de La Paz”. Su declaración textual habría sido: “vamos a denunciar de manera documentada, jurídicamente ante los veedores internacionales. Yo he pedido la presencia de (países de) Europa, de Naciones Unidas, de La Organización de Estados Americanos, la Fundación Carter y vamos a demostrar cómo Antonio Costas hace una campaña abierta a favor de Leopoldo Fernández”.

El MAS y sus candidatos, para los que todavía tenían alguna duda, están repitiendo literalmente y a pie juntillas la estrategia político-electoral exitosa que le diera sus sendas victorias de diciembre de 2005, julio de 2006, agosto de 2008 y enero de 2009. Entonces el enemigo era Podemos y los prefectos, un conjunto, según el MAS, de “vendepatrias” y “neoliberales”; ahora el enemigo escogido es el binomio de Manfred Reyes Villa y Leopoldo Fernández, que ha sido etiquetado como la quinta esencia del “separatismo” y el “terrorismo”. Posicionar esta estrategia maniquea y de polarización, le permite al partido de gobierno un manejo simple y contundente de la comunicación política.

Pero aquello no es suficiente, porque para poder ejercer su avasalladora propaganda y la utilización del aparato del Estado para la campaña, necesita amedrentar al Organismo Electoral, al extremo de paralizarlo cuando lleguen las denuncias y los reclamos. Así sucedió con Salvador Romero los años anteriores, cuando se convirtió en el blanco de los ataques y las iras del candidato del MAS: en vísperas de la realización de los procesos electorales se le pidió, sistemáticamente, al entonces Presidente de la Corte Nacional Electoral su renuncia, tanto de manera privada como pública. Hoy se repite la receta para mantener al Organismo Electoral atemorizado y sin capacidad de reacción.

Dependerá pues de la fortaleza espiritual de los tres vocales de la Corte Nacional Electoral el que las bravuconadas y amenazas no cumplan con su cometido. La ciudadanía ha hecho su parte coronando con éxito la epopeya democrática de la construcción del Padrón Biométrico. Ojalá que este espaldarazo histórico sea más fuerte que las tremendas presiones del oficialismo. El pueblo ha demostrado que confía en el árbitro imparcial… es deseable que el árbitro le devuelva con entereza y valor esa confianza. Hasta ahora ha sido así y por ello merecen nuestro apoyo y felicitación.
===========
El autor es sociólogo y constitucionalista.